lunes, 19 de mayo de 2025

Inversiones ganaderas fraudulentas causan un gran escándalo financiero en Uruguay

 

Se descubrió que muchas de estas inversiones estaban respaldadas por "vacas fantasmas", en otras palabras, animales que realmente, no existían.

En Uruguay, se ha destapado recientemente un escándalo financiero de gran magnitud relacionado con inversiones en ganadería. Empresas como Conexión Ganadera, el fondo ganadero más grande de Uruguay que manejaba alrededor de 400 millones de dólares producto de los inversores particulares, además de los grupos República Ganadera y Larrarte que ofrecían a los inversionistas la posibilidad de adquirir ganado, prometiendo rentabilidades fijas en dólares.

El esquema operaba de la siguiente manera: los inversores aportaban capital para la compra de ganado, que supuestamente sería criado y vendido para generar ganancias. No obstante, en muchos casos, el ganado nunca fue adquirido, y los retornos prometidos se pagaban utilizando el dinero de nuevos inversores, en un esquema conocido como "Ponzi". Este fraude afectó a alrededor de 6.000 inversores, incluyendo ciudadanos uruguayos y extranjeros, con pérdidas estimadas en aproximadamente 350 millones de dólares. 

La situación se agravó cuando uno de los cofundadores de Conexión Ganadera, Gustavo Basso, falleció en un accidente automovilístico en noviembre de 2024. Tras su muerte, se reveló que la empresa tenía un déficit patrimonial significativo y que gran parte del ganado que gestionaban no existía.

Este escándalo ha puesto en entredicho los mecanismos de control y regulación en el sector ganadero uruguayo. A pesar de contar con un sistema de trazabilidad de ganado reconocido internacionalmente, las autoridades no detectaron las irregularidades a tiempo. Actualmente, se están llevando a cabo investigaciones judiciales y se han presentado denuncias penales contra los responsables de las empresas involucradas.

Además, se están evaluando posibles acciones legales contra el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) por presuntas omisiones en los controles del ganado, lo que podría haber facilitado la comisión del fraude. En Uruguay, los negocios financieros están regulados por el Banco Central, pero estos fondos, al operar bajo el modelo de capitalización de ganado, no estaban regulados.

Muchos de los afectados continúan luchando por recuperar una parte de sus inversiones, aunque los expertos advierten que la posibilidad de reembolsos completos es mínima. 

Este caso ha generado una profunda preocupación en la sociedad uruguaya y ha afectado la confianza en las inversiones ganaderas, un sector clave para la economía del país.

Noticia redactada por el equipo de GuiAgropecuaria

1 comentario:

  1. El escándalo de las vacas fantasmas en Uruguay ha revelado graves fallas en la regulación, control y fiscalización del sector ganadero.

    Algunas de las soluciones inmediatas pudiesen ser:

    1. Fortalecer la trazabilidad del ganado, Aunque Uruguay tiene uno de los sistemas más avanzados de trazabilidad, este caso demuestra que puede haber vulnerabilidades.

    2. Regular las inversiones agropecuarias como productos financieros.

    3. Responsabilidad penal y civil efectiva, en contra de los posibles implicados.

    4. Mecanismos de compensación y prevención para inversores, como medida para proteger a los "malogrados" inversionistas y los próximos ha invertir.

    5. Mejora en la gobernanza del MGAP y controles cruzados, crear una plataforma digital centralizada, regulada por el Estado (por ejemplo, a través del MGAP y en coordinación con el Banco Central), donde toda inversión en ganado de terceros deba ser registrada, verificada y autorizada.

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